[Contenidos] ¿De dónde vienen los contenidos?

La lista de tipos de contenidos ordenados de más a menos aportación a la blogosfera (u otra comunidad) en cuanto a contribución sobre un tema concreto y también a su origen sería:

  • Original: Lo reconocerás porque será el post que te llene de orgullo… aunque luego parezca (y solo parezca) que a nadie le interesa leerlo.
  • Inspirado: Lo reconocerás porque al final o en algún lugar saldrá un ‘vía’ como forma de agradecimiento a esa musa encubierta.
  • Reciclado: Sin los dos previos, es imposible que pueda producirse ya que necesita una mínima materia prima para existir.
  • Filtrado: Entramos en terreno del content curator pero de uno que aporta un punto de vista a los contenidos que elige ya que realiza el filtro manualmente, bajo su criterio personal.
  • Agregado: Cuando el content curator agrega contenido de una manera automática, su aportación de valor a un debate concreto es mínima.
  • Repetido: La aportación es alta para las personas que no han sido impactadas antes por el mensaje pero baja para los que ya lo habían leído. La diferencia con el siguiente tipo de contenido es que aquí lo que se repite o promociona es propio.
  • Duplicado: Lo más bajo en esta escala sería el contenido duplicado que, además de ser malo para el SEO, dice más bien poco de la persona que lo utiliza. Hay algunas herramientas para detectarlo como autores pero, desde el punto de vista de lectores, es difícil de distinguir si solo se consulta una fuente.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 93 (21 de mayo de 2012). Suscríbete gratuitamente para recibir un artículo exclusivo cada lunes.

Carnaval: marketing de contenidos o cómo lo llamamos

Cristina y Carlos han puesto en marcha un nuevo carnaval, esta vez sobre RRPP. Un tema que me toca más de cerca que el de salud, más aún porque han dedicado el primer tema al marketing de contenidos a ver si entre todos conseguimos ponernos de acuerdo. La pregunta que lanzan incita a contestar: ¿el marketing de contenidos es comunicación, marketing o algo nuevo?

Más o menos yo ya contesté en mi libro y en esta pregunta frecuente: no es nuevo (eso es seguro) y tiene algo de marketing y algo de comunicación (ahí es donde está el problema). Mi aportación al debate podría terminar aquí pero reconozco que se pueden llenar páginas y páginas sobre el tema (en mis clases lo evito para no comerme todo el tiempo). Las primeras aportaciones ya lo han demostrado: es muy fácil escribir sobre ello porque todos tenemos una opinión. Y (sigue aumentando la bola del problema) se puede contestar sin haberlo practicado, igual que cualquiera puede hablar de política solo por ser ciudadano que sufre las consecuencias.

Pero la comunicación, el marketing, las RRPP, el periodismo… no son democracias, cada uno hace lo que quiere (y este problema sigue creciendo cada vez que alguien hace lo que quiere). El contenido ha estado siempre presente en todas estas disciplinas, ¡lógico! Entonces, ¿por qué se nos ha ocurrido ahora cambiarle el nombre? Dicho rápido, porque podemos y, además, queremos. Lo explico con dos ejemplos de sectores muy diferentes: detergentes y cine.

  • Cada cierto tiempo, nuevo detergente. Añaden (por decir algo) ingredientes que se sacan de la manga y los añaden también al nombre. Resultado: ¡novedad en el mercado! Sigue siendo detergente pero ahora es concentrado, líquido, con lejía, con suavizante… cualquier cosa que se le quiera poner. Y seguirá evolucionando, de eso se encargan los departamentos de i+d+i.
  • Los inventores en los inicios del cine (una época en la que las patentes eran dudosas) añadían o cambiaban una pieza, le ponían nombre al nuevo aparato y a triunfar. Eran pioneros dignos de admiración por sus innovaciones y nunca se ha parado de añadir más tipos de cine: sonido (mono, estéreo, envolvente, con altavoces hasta en el techo…), color, panorámico, digital, 3D, IMAX… Por no hablar de los soportes domésticos o de las versiones que se comercializan para venta (¿cuál debe ser la diferencia entre ‘edición diamante’ y ‘platinum’?).

El objetivo siempre ha sido el mismo para cualquier empresa, utilice la disciplina que utilice: diferenciarse para vender. Unas más indirectamente que otras, con más prisa que otras, a más gente o menos, pero siempre vender a alguien. Y ése alguien es quien tiene el poder de elegir (¡con el usuario hemos topado, menudo problema porque cada uno quiere una cosa!). La evolución del mercado la dicta día a día el ser humano dejando fuera lo que no le gusta, lo que no cumple sus expectativas. Solo hay que dejar que el tiempo pase y analizar las consecuencias de ésas elecciones para seguir evolucionando. La Historia está llena de cosas que han dejado de usarse, es algo normal, pero cuesta dar el brazo a torcer.

Por eso, mientras, debatimos y nos dan rabietas cuando alguien no utiliza bien el nombre que creemos es el correcto porque es el que usamos nosotros. ¡Y hay tantos ejemplos! Porque, para vender más, hay que seguir la moda (¿o no?) y si ahora toca hablar de marketing de contenidos, estrategia de contenidos, storytelling, transmedia, branded content, periodismo de marca… pues se habla desde la perspectiva que sea para incluir esas palabras clave y salir bien parados en buscadores. Y no importa mucho el resultado de la mezcla porque se habrá conseguido lo que quiere, en este caso, no el cliente si no la empresa. Vender, siempre vender.

Está claro que poner un nombre ayuda a estandarizar, define tareas y eso es importante también desde el punto de RRHH. Y ahora sí, implicando a toda la empresa, vamos a acabar de petar el problema que no ha parado de crecer en todo el post (y en los ya casi 4 años que llevo hablando de marketing de contenidos): ¿a quién contratamos para hacer estas tareas si no somos capaces de distinguir cuáles son?

  • Si contenidos es igual a escribir, ¿busco periodista, blogger, copy, redactor? Pero ellos no me harán un plan de comunicación, de marketing, de medios social o de contenidos, ¿o sí? Es más, ¿necesito uno de cada? ¿Se llama estrategia de marketing de contenidos, plan de contenidos, estrategia editorial…? Mejor busco consultorías pero de marketing online, de RRPP, de SEO, de inbound marketing… Espera, ¿consultorías o agencias?
  • Vamos a más porque dentro de la estrategia de contenidos también está la curación de contenidos y entonces, para decir que no hace falta una etiqueta nueva para hacer lo que ellos ya hacen, saltan documentalistas, periodistas y hasta community managers (y éstos ya tienen sus propios problemas porque los social media strategists aún buscan su hueco).
  • Soluciones al problema: ¿nos dejamos de rollos y contratamos a quien lleva años haciéndolo (nombres reconocidos como marketing, comunicación, periodismo) o a quien se ha especializado en una cosa concreta aunque tenga un nombre que no nos suena de nada?

Dudar y debatir es sano para el corazón, menos mal… pero solo para algunos porque los que tratan de aprender para ponerlo en práctica en su negocio o empresa no tienen la culpa de que no nos pongamos de acuerdo. Y, como en política, son ellos los que pagan las consecuencias: se apuntan a cursos que dicen que son de una cosa pero acaban siendo de otra; se ponen a ello y acaban haciendo algo que no es ni una cosa ni la otra; se desengañan porque no consiguen lo que querían (vender, ¿recuerdas?) a pesar de que ya hayan comprado algo (un curso o una consultoría, porque alguien sí ha vendido algo).

La evolución no se detiene así que las personas que se sienten engañadas se quejarán de esa palabreja nueva que no les ha servido (como con el detergente) y buscarán algo similar con otro nombre que otros les venderán (como el cine busca nuevas experiencias) aunque los que inicialmente lo habían hecho seguirán buscando clientes… ¿de quién es la culpa? ¿Del cliente que se deja asesorar sin informarse antes, del vendedor sin escrúpulos que se aprovecha del momento o del que tiene buena fe pero no consigue llegar al cliente? El tiempo, tan sabio como siempre, ya se encargará de dejar a cada uno en su lugar y se deshará de los culpables (si es que hay que culpar a alguien de todo este embrollo o burbuja).

Debates de este tipo hay en todos los sectores y no lo vamos a solucionar a corto plazo. Solo espero que este carnaval sirva para quitar algunas máscaras. Será el lector de todos los posts que se están generando quien decida si las quita a los conceptos de debate o a las personas que los utilizan en su beneficio. Y, ya que has llegado hasta aquí, 1.150 palabras después, no te vayas sin dejar un comentario o participar en el #carnavalRRPP.

[Contenidos] Sin excusas para actualizar nuestros canales

Cada lunes republico aquí un artículo antiguo de mi newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes a los suscriptores pero con contenido exclusivo.

Aunque la inspiración huya de nosotros, siempre podemos recurrir a otros tipos de contenidos que no tienen que estar creados por nosotros. En Search Engine People nos dan algunas:

  • Utiliza contenidos generados por el usuario: antes (en los inicios de la web 2.0) se le llamaba UGC de sus siglas en inglés, ahora son los medios sociales y en general cualquier forma de interacción con ellos como pueden ser encuestas, preguntas directas o foros.
  • Paga para que piensen otros: a veces tu día a día no te deja tiempo para pensar en escribir, entonces mejor externalizar.
  • Busca la colaboración de otros: invitar a que otros escriban en tu blog (guest posting) no implica necesariamente un desembolso.
  • Haz de content curator: hay muchas herramientas para ejercer como tal y el proceso para ponerse en marcha solo quita tiempo la primera vez que se monta.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 75 (16 de enero de 2012). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

«Marketing de contenidos. Estrategias para atraer clientes a tu empresa», mi noveno libro

Actualización febrero 2020: la primera edición del libro ha sido descatalogada, la nueva solo está disponible en Amazon. Lee los detalles en mi post de lanzamiento.

Ya está aquí, ¡por fin! «Marketing de contenidos. Estrategias para atraer clientes a tu empresa» llega a librerías mañana, día de Sant Jordi, pero desde hace un par de días se puede conseguir en preventa en Amazon, Casa del libro y FNAC. Cuando esté en formato ebook, lo anunciaré por los canales habituales.

He ido explicando su historia en mi newsletter y también en el tumblr del libro pero, por resumir, llevo un par de años detrás de verlo publicado y he tenido varios momentos en los que llegué a pensar que debería haberlo autopublicado en lugar de recurrir a una editorial tan tradicional como Anaya. Pero he venido aquí a hablar de mi libro así que, olvidados momentos peores, veamos por qué comprarlo.

«Marketing de contenidos. Estrategias para atraer clientes a tu empresa» explica paso a paso:

  • Cómo identificar contenidos de calidad y cómo utilizarlos en beneficio de la empresa
  • Cómo crear una estrategia de contenidos, implementarla y medirla
  • Cómo redactar textos online, desde tuits a ebooks pasando por guiones de vídeo o posts
  • Cómo editar para mejorar los textos propios y de otros (en el caso de externalizar)
  • Cómo usar los contenidos propios más de una vez y los ajenos  más de lo acostumbrado para llenar un calendario editorial
  • Cómo documentarse sin caer en la infoxicación

Está pensado y también dedicado a cualquiera que quiera usar los contenidos de una forma profesional, incluyendo los que saben bastante, un poco o nada de marketing, redacción y contenidos. Es un libro práctico, con muchas preguntas que tendrá que responder el lector y con muchas referencias para seguir profundizando.

«Marketing de contenidos. Estrategias para atraer clientes a tu empresa» es el noveno libro que publico si contamos los escritos en coautoría o el cuarto que firmo sola. De entre todos, me recuerda especialmente al primero: los dos me costaron tanto de escribir como de ver publicados. Es curioso que aún así, ya tenga escritas algunas páginas del próximo libro.

[Contenidos] ¿Blogger, creador de contenidos, content curator, periodista?

Cada lunes republico aquí un artículo antiguo de mi newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes a los suscriptores pero con contenido exclusivo.

El ser humano pone etiquetas para enfrentarse a lo desconocido: si sé cómo se llama, no da tanto miedo. El problema es que en Internet es difícil saberlo todo y los cargos que definen profesiones o tareas no siempre reflejan la realidad del día a día porque cambia demasiado deprisa.

En el caso de los contenidos, además, la mayoría de empresas no tienen una persona dedicada con lo que es aún más difícil ponerle un nombre. Si pensamos en blogs, tendría que ser más fácil pero tampoco es así: ¿un blogger es un creador de contenidos o un content curator o un periodista? Hay tantas posibilidades como blogs, así que ese no es el debate: lo importante es que se exprese y utilice los contenidos de acuerdo a su manera de entender la realidad que comunica.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 67 (21 de noviembre de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

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