«Plan de contenidos para medios sociales», mi nuevo libro

Portada de mi libro "Plan de contenidos para medios sociales"
Portada de mi libro «Plan de contenidos para medios sociales»

Lo mencioné mientras lo preparaba en Twitter y por aquí hace unas semanas al avisar del lanzamiento del «Manual de blogging«: ¡tengo nuevo libro (y van 14)! Como suele ocurrir en los libros de no ficción, su título es muy claro: «Plan de contenidos para medios sociales«. Es el 3º que publico con la editorial UOC y sigue el formato habitual de su colección EPI (El Profesional de la Información).

Puedes ver el índice en la página del libro pero básicamente sigue las columnas que debería tener un plan de contenidos. Así, explico desde los objetivos de las piezas a su frecuencia de publicación, pasando por la temática, el canal o la fuente del contenido, y mucho más.

Paso a paso, como es mi costumbre, voy mostrando cómo rellenar el plan para que cualquiera pueda hacerlo. Por eso el libro se complementa con una plantilla en XLS que puedes descargar y personalizar según creas conveniente para que se adapte a tu empresa.

«Plan de contenidos para medios sociales» está pensado para ser una extensión de los otros libros que he publicado sobre contenidos. Tanto después de leer «Estrategia de contenidos» como «Marketing de contenidos«, incluso con «Manual de blogging» es fácil que tengas ganas de ponerte a trabajar y con ellas aparezca la necesidad de hacer un plan para implementar todo lo aprendido. Seguramente por eso es mi libro más práctico, y eso que todos intento que lo sean.

Lo puedes comprar en papel en Amazon, en la web de la editorial y en librerías.

Cuando termino de escribir un libro, me quedo con una sensación de vacío. Pero la verdad es que ya tengo en mente un par de ideas para nuevas aventuras editoriales. Ya te iré contando…

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Televisión
El año pasado se estrenaron 455 series, solo en los Estados Unidos. Podría preguntarme entonces por qué es más fácil ver repeticiones de la serie de la comunidad de vecinos que alguna de esas novedades. Pero lo que me llama la atención del artículo de dónde he sacado el dato es que sugiere que ha desaparecido la costumbre de hacer resúmenes previos antes de cada capítulo. Es cierto, pero hasta cierto punto. Algunas series lo necesitan para poder seguir el hilo pero también es verdad que algunos los paso deprisa porque estoy haciendo mi propio maratón. Lo mismo que los créditos iniciales que se han reducido a unos segundos y, pobres, los finales quedan cortados por continuidad. Al final, ¿queda solo la serie?

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Los zombies no suelen verse en los anuncios. Hay muchos en series, sí. Casi demasiados cuando se pusieron de moda. Pero parece que pocas marcas quieren tener a uno como protagonista, no vende mucho. Claro que para un día como el de hoy, el de ayer y de hecho toda la semana, es fácil hacer campaña con personajes, digamos, de terror. Bueno, una familia de vampiros que aparca para darle el biberón a su pequeño no es muy terrorífico. Es lo que ha hecho Renault y de paso explica alguna de las características de su coche. No es mala idea aprovechar épocas como éstas. Lo malo es que caduca muy pronto, lo bueno es que posiblemente el año que viene lo puedan volver a aprovechar.

Cine
El guión de algunas películas deja mucho que desear. Lo sabemos todos. «No hay quien se lo crea» es algo que no pasa solo en el género de ciencia ficción donde es fácil meter la pata… puede ocurrir en una comedia o en una infantil. No importa, lo tenemos aceptado. Por eso ver una lista de pelis con tramas de dudosa credibilidad me ha hecho reír. Muchas de ellas las he visto y solo con algunas me lo había planteado como algo disparatado. Quizá porque ya lo sabía cuando decidí verlas y no me importaba. Ésa quizá sea la diferencia con la ciencia ficción: se espera que sea «real» y nos lo creemos, aunque luego los científicos pongan el grito en el cielo. Al final, lo que queda es la moraleja y suele haberla en todas.

Internet
Hay muchas formas de contactar conmigo. Mis alumnos tienden a utilizar los campus de sus centros y mis clientes ya saben que suelo estar pegada al correo electrónico. Ahí no hay misterio. La curiosidad viene de los que no conozco así que de tanto en tanto me divierto con las estadísticas: ¿por dónde suelen contactarme más? Mensajes por Messenger, Twitter y LinkedIn. Hay dónde elegir además del formulario, es evidente. Pero desde que  LinkedIn abrió la opción de chat, hay más personas que lo utilizan y ha bajado Facebook. Al menos entre mis contactos que suelen ser profesionales. Es una métrica para mí tan interesante como si el formulario se envía después de haber visitado una página concreta de mi web.

[Contenidos] La calidad de lo que publicas no depende de tu competencia

A la pregunta de si consideras tu contenido de mayor calidad que el de tu competencia, el 74% contesta de alguna manera que sí. Son datos del estudio de CoShedule que incluye otros igual de interesantes sobre marketing. Pero me voy a centrar únicamente en el concepto de calidad de los contenidos.

Se suele decir que las comparaciones son odiosas pero también son (muy) necesarias cuando hay tantas personas y empresas publicando a todo ritmo piezas de contenido. Por eso siempre sugiero revisar qué hace la competencia y aprender de ello. Una de las cosas para las que es útil es para juzgar el contenido que estás publicando respecto a lo que el resto está haciendo. ¿Tus contenidos son los mejores de tu sector? Una cura de humildad no viene mal de tanto en tanto y ojalá siempre fuésemos los primeros… pero me parece imprudente pensarlo sin investigar un poco y tener unas mínimas pruebas.

Pienso en ése 74% que considera sus contenidos de mayor calidad y me pregunto cómo lo habrán valorado. En CoSchedule buscan la definición de calidad en base a 2 parámetros:

  • Tiempo invertido: el mayor porcentaje se lo lleva entre 1-3h con un 28%, aunque muy cerca está el 4-6h con un 24%. La media de tiempo que ha publicado Orbit Media actualizada respecto al 2016 es de 3h y 20 minutos para hacer un post.
  • Resultados obtenidos: el 57% dice conseguir resultados positivos en su marketing. En el caso de Orbit Media que se centra en bloggers, solo el 7,3% dijo que le decepcionaban los resultados de su blog.

Con estos (y otros) datos, las conclusiones de CoSchedule son que no hay relación entre más tiempo invertido y mayores resultados, aunque sí una ligera relación entre la calidad y los éxitos obtenidos. Curioso, ¿no? Es fácil pensar lo contrario: cuanto más tiempo, mejor contenido y más resultados. Pues parece que no siempre es así…

La cuestión es que solo sabemos lo que nosotros hacemos y conseguimos. No puedes saber cuánto tiempo ha dedicado otra persona a redactar un post (¿cuánto crees que me ha llevado a mí hacer éste que estás leyendo?). Tampoco está claro que puedas averiguar los resultados que ha obtenido, más allá de métricas públicas como veces que se ha compartido socialmente o su posición en Google por una determinada expresión (¿cuántas personas crees que se interesan por mis libros después de leer mis posts?).

En mi opinión, el usuario es quien decide cuándo un contenido es de calidad y la empresa es la única que puede decir si es rentable y, por tanto, exitoso. Lo primero es subjetivo (totalmente personal) mientras que lo segundo es objetivo (se basa en números). Por eso, cuando estudias a la competencia, solo puedes conocer una parte de la ecuación. Y lo mismo les pasa a ellos.

Así que, ¿de dónde sale ésa afirmación de que lo que publicamos es de mayor calidad que lo de nuestra competencia? Puede que hable el ego y sea la típica pregunta que se contesta en positivo por vergüenza, aunque sea una encuesta anónima. Llámame optimista pero no me creo que haya tantas empresas haciendo malos contenidos. La sensación que tengo es que cada vez hay más buenos ejemplos.

Te planteo un ejercicio/reto: revisa los contenidos de tu competencia y ponles nota. Luego, haz lo mismo con los tuyos (lo más objetivamente posible, claro). ¿Quién gana? Déjame un comentario con tus resultados si te atraves a intentarlo.

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Televisión
Hay series que es mejor no tocarlas. Sí, en cine es muy común hacer reboot… pero en tele no hace falta, de verdad. Para demostrarlo, revisa «El coche fantástico», «MacGyver» o incluso aquello que llamaron «Mockingbird Lane«. Repito: no hace falta empañar nuestro recuerdo de la infancia con estropicios semejantes. Leo que quieren hacerlo con «Magnum» y «Corrupción en Miami» y ya estoy sufriendo, sobre todo con la segunda serie. Aquellos decorados eran geniales para la época y van a ser muy difíciles de mejorar. Ni lo intentaron en la horrible película de hace unos años. Y, bueno, hay muchos detectives privados pero no todos tienen a Higgins, digamos, de supervisor.

Cine
Ya está, no busques más motivos por los que (no) te gusta el cine actual porque David Fincher ha encontrado el principal. En su opinión que comparto totalmente, es porque se basa en una cuenta atrás espectacular y «no hay tiempo para los personajes». Es otra forma de decir que los guiones no dan profundidad a los personajes, no les permiten mostrar su evolución o dejar entrever su personalidad en diálogos o situaciones corrientes. Sí hay, en cambio, muchos minutos sobre explosiones. El cine podría resultar herido siguiendo un camino tan accidentado pero según Fincher aún no ha muerto. Va cambiando, lo cual es bueno para todos menos para los nostálgicos de otra época.

Internet
Suelo comentar listas de pelis pero no hay muchas opciones de revisar una lista de páginas web así que al encontrar una con las 15 más influyentes no puedo evitar traerla a este párrafo. Es lógico que estén presentes cualquiera de las páginas que visitas cada día, es lo esperado en realidad. Entonces piensa por un momento: ¿es más influyente Amazon o eBay? ¿YouTube o la Wikipedia? ¿Yahoo! o Google? Bueno, éste quizá estaría un poco más claro pero, ¿Facebook o WikiLeaks? Es posible que cada usuario ordene la lista según su gusto, lógico. Y es que en las listas así es tan interesante quiénes la componen como quién la gana (por si lo dudas, es a quien le preguntas cosas).

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¿Has visto alguna vez un coche particular con publi? En fácil ver los taxis de Barcelona con carteles en la baca y algunos coches que van tuneados por completo. Es más, cuando veo un par de coches nuevecitos del mismo modelo seguidos parados en un semáforo me imagino que forman parte de alguna campaña. Pero hasta ahora no me había planteado que un coche cualquiera podría ser un anuncio móvil. Los requisitos son muy sencillos, según leo. Básicamente tener el coche en buen estado y tener una ruta fija. Dicho así, serviría cualquiera que va a trabajar o lleva a los niños al cole. Pero ni todos los coches son iguales ni todas las rutas tienen el mismo público así que lo que se gana también es diferente.

[Contenidos] Pregunta a Google por lo táctico, no por lo estratégico

No todo está en Google. A veces cuesta recordarlo, sobre todo cuando es tan fácil caer en la tentación de comprobarlo: un click, una frase dicha en voz alta y la respuesta a la pregunta (casi seguro) aparecerá en pantalla. Podemos preguntarle muchas cosas: qué tiempo hará mañana, cuánto dura una película y qué cine me queda más cerca para verla, dónde puedo comprar el último cacharrito de una marca… es tan sencillo, ¿verdad?

Las preguntas más habituales que se plantean a Google (y a YouTube) suelen tener fácil respuesta porque suelen estar relacionadas con algo táctico: 30 segundos y ya lo has solucionado. Pero si profundizamos en la estrategia y la cuestión se vuelve más personal, hacen falta más de un par de minutos para encontrarla. De hecho, por muy buen buscador que sea, es muy posible que no la tenga.

Por ejemplo: puedes preguntarle a Google cuándo has de publicar en redes sociales y te dará unas cuantas opciones (léase: páginas que responden a esa pregunta). Creerás (o no) que la mejor es la que aparece en las primeras posiciones y harás lo que te dice. Así que ya tienes una respuesta a tu pregunta que era algo básico para continuar en tu día a día, algo que considerabas urgente en ese momento, ¿verdad? Y quizá lo era, incluso lo consideraste importante y lo querías hacer por tu cuenta pero, en realidad, estás delegando la decisión y haciendo lo que te dice la página mejor posicionada. Si tu duda te la ha solucionado Google o el creador del artículo sería tema para otro debate.

Otro ejemplo: pregúntale a Google quién es tu buyer persona y seguramente te sugerirá artículos que expliquen qué es y cómo hacer estos perfiles. Pero no podrá darte la respuesta que buscas. ¿La tuya, solo para tu negocio? Sabe muchas cosas de ti y de tu empresa, pero (aún) no es tan inteligente… quizá algún día lo sea pero, de momento, no te conoce lo suficiente como para responder a algo tan personal. Y una estrategia siempre lo es porque se basa en decisiones del estratega. Es por esto que, aunque decía que Google está siempre a mano, algunos prefieren dirigir la pregunta a una persona. Entonces, delegan en un experto, alguien que (se supone) ya sabe la respuesta.

¿Qué te parece si ponemos precio a estas preguntas? Un consultor cobra por el tiempo que dedica a sus clientes, ¿quieres pagarle por algo que solucionarías con una rápida búsqueda en Google? Ya, el problema es que hay muchas opciones posibles y quieres una recomendación que te ahorre a ti el tiempo de encontrar la mejor. Crees que si el consultor ya lo sabe, no le cuesta nada responder un tuit o un correo. Pues no es así porque ‘la mejor respuesta’ suele ser estratégica y necesita que se invierta tiempo en ella. Un ejemplo rápido: puedes preguntarle cómo configurar un formulario de MailChimp pero lo que deberías estar preguntándole es dónde colocarlo en tu web (no en la de quien escribe el artículo) para conseguir más suscripciones que es tu objetivo.

Resumiendo, tenemos:

  • preguntas tácticas de fácil respuesta que suelen ser las urgentes a corto plazo
  • preguntas estratégicas difícilmente contestables por un algoritmo que suelen ser las importantes a largo plazo

Pero la cuestión de fondo es que muchos se plantean las preguntas a corto plazo sin haber pensado aún en la estrategia. ¿De qué sirve preguntarse el cómo hacerlo si no se sabe el por qué? De nada, por eso lo mejor que puedes hacer es invertir en las respuestas adecuadas y el resto dejárselo a Google.

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