En la prensa de ayer Cuatro publicó (vamos, contrató) un anuncio a doble cara de un flamante rojo (todo lo rojo y flamante que la tinta de prensa permite) para contarnos su fórmula del éxito (nada que ver con la Fórmula 1 y sus líos, al menos de momento).
La ecuación que proponen la han maquetado con sus burbujitas con formas de logo para contener los números:
Cuatro x 18 meses de vida = 8,1% audiencia total = 10,2% audiencia comercial = +1000 marcas que confían en nosotros
Debajo, la explicación a modo de cadena entre ellos (su programación), audiencia (los que elegimos, ¿no?) y anunciantes (la pasta):
«Las series eligen cuatro. Los buenos programas eligen cuatro. La audiencia aprecia los programas y las series que eligen cuatro. Los anunciantes prefieren a la audiencia de los programas y las series que eligen Cuatro. Vuestra elección ha conseguido que, en tan sólo 18 meses, Cuatro sea un éxito«.
Ya a pie de página, el mensaje que debería encabezarlo todo: «Gracias por elegir la televisión diferente. Practica Cuatro». Pero aún hay más, en letra pequeña, la explicación de qué es audiencia comercial: «la que buscan los anunciantes: individuos urbanos de 16 a 54 años y de clases altas y medias».
¿No crees que el anuncio es un pelín retorcido? Vale, nos dan las gracias porque les hacemos ganar dinero. Pero ¿nos tienen que dar el total de marcas con las que interrumpen las series y programas que elegimos? Parece que les estén dando las gracias a los anunciantes, no a nosotros.
Srs de Cuatro, el éxito, la audiencia, ¡somos nosotros! ¿Qué pinta aquí el target comercial?
Por cierto, a saber por qué en las tres primeras frases ‘cuatro’ va en minúscula y luego en mayúscula. Quizá siga la misma lógica que el poster que patrocinó en Catalunya el estreno de «Cuenta atrás»: un gazapo.