Media News S19 A24

Internet
Dos noticias que parecen indicar que el futuro no era tan fácil como parecía: 1/ a la fatiga de Zoom hay que sumarle un nuevo estudio que confirma que la actividad cerebral mientras estamos en videollamadas es baja. Doy fe que en algunas reuniones largas lo más divertido es fijarse en cómo se desenfoca de bien o mal el fondo, pero eso ya es prestar atención a algo, ¿no? Y 2/ las contraseñas van a ser difíciles por ley, al menos en el Reino Unido, pero quién sabe si acabaremos teniendo que recordar 16 caracteres random para las decenas de servicios que tenemos contratados online.

Publicidad
Era cuestión de tiempo que hubiese alguna campaña hecha con IA de manera que bien pudiese ser real. Y para más diversión es un viaje en el tiempo o, más concretamente, una imitación de lo que podrían ser fotografías antiguas para promocionar un concepto que oímos mucho últimamente, pero que no es nuevo: el desperdicio alimentario. Quizá es un tipo de anuncio que solo pueden hacer las marcas que llevan más de un siglo y medio en el mercado, pero está claro que aprovecha bien lo que puede hacer la inteligencia artificial. Por cierto que Heinz juega con la IA hace tiempo, así que me parece una buena evolución.

Cine
Lo divertido de buscar películas en IMDb no es solo encontrar sus trivias, secundarios que no recuerdas dónde viste o localizaciones que te suena haber visitado. También sirve para descubrir las pelis que se supone están relacionadas o las que pronto se estrenarán. Entonces es cuando llegas a la conclusión que has estado desconectada de los estrenos porque, ¿»Sister Act 3«? ¿Otra vez Willem Dafoe metido en una peli de Drácula? Quizá sea porque los blogs de cine que leo se dedican a promocionar afiliados de Amazon o de plataformas. O porque hace demasiado que no piso una sala.

Televisión
Este fin de semana es Eurovisión y ya hace unos días que se caldea el ambiente con semifinales, canciones anteriores y las que se supone tienen posibilidades de ganar este año. Es posible que también haya gente preparando menús con pica-pica de varios países, incluso haciendo banderitas para colocar en los palillos de los canapés. Claro que también habrá gente que se esté enterando ahora de que la final es el sábado porque no es lo que llamaríamos eurofan. A mí me gusta el espectáculo, pero no me quita el sueño quién gana ni cómo se reparten los puntos. ¡Mis 12 van para el equipo de realización!

[Contenidos] La (no) necesidad de publicar por publicar

Hace ya tiempo que me vengo quejando de falta de interés por las redes y leer a Lucas Aisa sobre contenido de relleno me confirma que no soy la única que piensa que algo falla en las publicaciones sociales.

Antes de mencionar un par de ejemplos reales de clientes, aclaro que yo también caigo en intentar mantener viva mi presencia repitiendo contenidos: unas 2/5 de mis publicaciones sociales son de relleno. Años atrás eran más, pero todavía podrían ser menos. Repetir es una forma de rellenar, más o menos justificada por intentar que el alcance no reduzca a la nada el esfuerzo que supone crear las piezas originales. Podría postear más de una vez al día, claro, pero eso sí sería rellenar por rellenar.

Y ahora los ejemplos. Un cliente publica cada día en su perfil de LinkedIn, aunque no siempre tiene contenido nuevo en su web para enlazar ¡y hay que alimentar a la bestia! Solución a corto plazo: reciclar algún post con un formato nuevo porque no hay presupuesto para crear más contenido nuevo (aunque lo hay para SEM por lo que he comprobado). La solución sin pensar en el problema sería reducir la frecuencia, pero eso acabaría llevando a abandonar el canal y no lo contemplan como factible.

Otro cliente publica una serie de materiales que por simplificar diré que son como un resumen anual. Hay que sacarlos por política interna, aunque solo cambian un par de números, así que dedican el mínimo esfuerzo porque el retorno público es inexistente. Solución a corto plazo: utilizar la misma plantilla desde hace unos cuantos años. La solución real podría ser buscar la forma de rentabilizarlos, aunque eso implicaría aumentar el presupuesto para cambiar estrategia, diseño y más.

En mi caso, republicar es una decisión tomada tras analizar el tiempo dedicado y el resultado obtenido; en el de mis clientes, es cuestión de que la inversión económica acaba en otro lugar, pero no me cuentan si antes o después de también calcular el retorno que les dan esos contenidos/canales. Es uno de los problemas de trabajar de fuera de la empresa: no siempre te cuentan algo que podría ayudarte a hacer mejor tu trabajo.

Como bien dice Lucas: «el efecto no es un incremento del presupuesto o de la dedicación, sino una bajada drástica de la calidad«. El usuario final puede percibirlo más o menos (mi sensación es que va a más), pero desde dentro desanima mucho ver cómo van los números sabiendo que se podría al menos intentar evitar.

[Contenidos] Impacto de la IA en la content curation

La inteligencia artificial está impactando en el mundo digital de forma tan rápida que a este paso lo acabaremos llamando también artificial. Hay datos que apuntan ese camino: ya solo el 12% está hecho por humanos y el 70% usa la IA para hacer borradores a diario o y semanalmente. Dentro de los niveles de madurez de la curación de contenidos, la IA también estaba presente, aunque los algoritmos han avanzado más deprisa que las empresas en abrazar las piezas de terceros.

Robin Good es de los que piensan que el componente humano es indispensable para hacer curation porque es su filtro el que aporta valor y merece seguirse. Ha enviado una newsletter sobre el impacto de la inteligencia artificial en la curación de contenidos con pros y contras (aclarando, cómo no, que evoluciona rápido, así que puede cambiar pronto).

Beneficios de la IA en la curación de contenidos

En resumen, la inteligencia artificial es una ayuda para la content curation al:

  • Descubrir: es mucho más fácil encontrar contenido relevante, sobre todo si se entrena al algoritmo.
  • Identificar tendencias, patrones y similitudes que costarían de ver sin un análisis ágil de datos.
  • Organizar las ideas y recursos de forma eficiente para destacar por encima del contenido mediocre.
  • Criticar y sugerir mejoras, además de profundizar en una idea para no quedarse en la superficie.
  • Encontrar fuentes y expertos relevantes que sirven de buen punto de partida.
  • Resumir, sintetizar e ilustrar cuando pieza de contenido, además de traducir y corregir.

Desventajas de la IA para hacer content curation

En resumen, la inteligencia artificial tiene algunos problemas con los contenidos, en general diría yo, porque:

  • No tiene ideas originales, repite lo que otros han dicho, sin abrazar la serendipia como hacemos los humanos.
  • No tiene experiencia real como sí tienen las personas que han vivido lo que han escrito, por mucho que la reformule.
  • No percibe emociones, ironías ni sarcasmos, no tiene empatía ni intuición.
  • No tiene un estilo propio y voz única, ni naturalidad, ni personalidad… o tiene varias, lo que es casi peor.
  • No diferencia información sesgada o inexacta, ni matices de contexto.
  • No se responsabiliza de sus decisiones, no tiene ética ni conciencia.

Todo esto hace que la comprensión del texto no sea tan veraz como podría parecer, haciendo que el contenido resultante no tenga suficiente calidad. Aun así, considerando los pros, la IA puede ser una ayuda también para hacer content curación siempre y cuando luego se le añada el componente humano.

Media News S17 A24

Televisión
Ya se sabe que ver un reel entero equivale a que el algoritmo te muestre un montón más, pero con los programas que buscan talentos es entrar en un bucle infinito. Son fragmentos oficiales, así que no hay infracción de derechos por medio, pero quizá por eso me sorprende más que haya tantos cachitos disponibles. Además, son de varios años, así que es como tener un histórico, no solo de cambio de miembros del jurado, también del tipo de concursante que triunfa más. Lo deben considerar como una forma de que más gente vea y acuda a la edición actual, pero lo cierto es que a mí me evita tener que verla.

Publicidad
Los premios siempre hacen ilusión y los publicitarios sirven para hacer un maratón de lo que se supone es lo mejorcito del sector. Viendo los Premios Nacionales de Creatividad 2024, una cosa es segura: no lo son por su distribución porque yo solo había visto a uno de los ganadores. Me da por pensar en cómo sería un premio que la gente pudiese votar: ¿se gastarían dinero en ponerlo más veces para que más personas lo viesen? ¿Ganaría así también otro hipotético premio a la marca más pesadita por repetitiva? Sería divertido ver qué campaña complementaria se inventarían las agencias para llevarse su premio.

Internet
Dicen que están preparando un concurso al que se les ha ocurrido llamar Miss IA y que en el jurado también habrá un par de IA. Vale, sí, está dentro de los World AI Creator Awards, pero la primera impresión que me deja el titular no es muy buena. Ya, claro, lo han buscado así para generar controversia y qué fácil es caer en ello… lo que me lleva a pensar en qué pasaría si fuese la propia IA la que tuviese que pedir votos, como si fuese una marca más en el párrafo de arriba. ¿Sería creativa, tiraría de fórmulas probadas o crearía alguna nueva que fuese la que todos usarían a partir de entonces? Nunca lo sabremos, ¿no?

Cine
Es divertido descubrir esas cosillas que te hacen disfrutar más de una película (u odiarla porque también puede pasar lo contrario). Claro que es más divertido cuando es una que has visto muchas veces y sabes que la próxima vez (siempre la hay para las grandes pelis) verás alguna escena de forma diferente. Seguro que es así cuando leas qué hay escrito en el código de Matrix. Además, tendrás una buena anécdota la próxima vez que comas sushi o cualquier comida japonesa porque parece ser que por ahí van los tiros. ¿Será que en el futuro tampoco quedarán Pizza hut/Tesco, como decían en «Demolition man»?

Sant Jordi, un día para leer o escribir

Hace ya 15 años que publiqué mi primer libro, así que he vivido la fiesta de Sant Jordi de diferentes maneras. Ha habido días tristes y felices, pero todos podría decir que han sido especiales y, aunque no estaré firmando, el de este año también lo es.

Por un lado, he conseguido reencontrarme con el placer de leer. Este curso me obligué a apuntarme a varios clubes de lectura para sacar tiempo para la ficción. Así que últimamente divido mi tiempo libre entre leer y escribir, casi como hago en mi vida profesional, pero por puro hobby. Me siento feliz de haber conseguido hacer un hueco en mi calendario (aunque sea a ratos y los fines de semana) para leer novelas y escribir una historia de ficción que ronda mi cabecita.

Como escritora de mapa que soy, avanzo en la estructura más que en el número de palabras, así que todavía no quiero contarte nada, pero sí puedo fantasear sobre la posibilidad de llevar el manuscrito a una editorial para publicarlo. Me conozco bien a las enfocadas a empresa y sería divertido aventurarme con el resto. Quizá en un par de años escriba un post sobre ello. ¡Hoy es el día perfecto para imaginar algo así!

Por el otro, y volviendo a la realidad, sigo buscando el equilibrio profesional que me permita escribir el libro de redacción de contenidos que hace demasiado tiempo tengo intención de publicar. Hasta ahora iba a paso lento, tanto por buscar el equilibrio con la ficción como por picos de trabajo, pero creo que a partir de mayo conseguiré darle un buen empujón (dejar a un cliente tóxico siempre genera un hueco en la agenda de los autónomos hasta que entra el siguiente proyecto).

Desde hace unas semanas, comparto algunos párrafos en mi newsletter y pido la opinión para saber si interesa o voy por mal camino. Los emojis dicen que sí, que a la gente le gusta, así que resulta un buen incentivo emocional para no dejar de escribir sobre mi profesión. Creo que hace falta poner un poco de orden y también distancia porque la mezcla de lo que hay publicado puede dispersar más que ayudar. En ello estoy, también rascando tiempo de donde puedo.

Como no puede ser de otra forma, también leo sobre el proceso de escritura, igual que sigo leyendo libros del sector, así que me gustaría terminar este breve post festivo con una frase que sirve para cualquier texto: «una historia empieza mucho antes de la primera palabra y acaba mucho después de la última«, Colum McCann en «Cartes a un jove escriptor«.

Para ser legal, te aviso de que utilizo cookies en esta web:    leer detalles y configurar preferencias
Privacidad