[Contenidos] Herramientas para leer newsletters

Lo acabo de comprobar: en mi Feedly sigo a 294 blogs (76 de ellos inactivos, qué lástima) y en mi Stoop recibo 78 newsletters (ahora te explico qué es). Y aún otro dato: dedico una media de 1h al día a leer alguna de esas 300 fuentes de información (sin contar lo que encuentro por Twitter). Este podría ser un argumento para que te apuntases a mi Content News (cada semana envío los artículos más interesantes que he leído), pero he sacado estos números para que compruebes el boom de los contenidos por correo electrónico. Tampoco es un post para explicarte cómo hacer tu newsletter (puedes contratarme para ello), es para ayudarte a leerlas.

Herramientas nativas para leer newsletters

Seguro que no soy la única que tiene varias cuentas de email, pero ¿tienes una solamente para recibir newsletters? Yo sí, antes usaba una cuenta diferente y varios filtros para etiquetar los correos, pero mi volumen de suscripciones iba subiendo y mi bandeja de entrada empezaba a llenarse de mensajes que acababa leyendo luego.

Así que el año pasado caí y revisé las opciones que había para leer las newsletters de forma independiente. Lo curioso es que, ahora para crear el post, he rebuscado las que tenía guardadas de entonces para ver cómo habían evolucionado y solo ha sobrevivido Newslettrs (y me sigue pareciendo poco clara, así que sigo descartándola).

Stoop

Me registré en Stoop, era la más sencilla para conseguir lo que quería: una web y app como Feedly, pero para newsletters.

Eso hace desde 2018: cuando te registras (gratis), te crea una cuenta de correo para que puedas suscribirte a lo que quieras y te organiza los mensajes por remitente. No es un gestor de correo así que no hay opción de contestar, pero tampoco hay carpeta de spam así que te llega todo sí o sí. Además, puedes guardar los envíos que te gustan y tienes un histórico de los últimos que has leído porque no hay papelera de reciclaje. Como extra, permite suscribirte a canales de YouTube.

Slick

Funciona prácticamente igual que Stoop, de hecho hasta el diseño de Slick es similar. La gran diferencia es que se trata de una app y no tiene versión web (al menos de momento). Tiene previstas algunas funcionalidades que pueden ser diferenciales, pero no parece que hayan avanzado mucho en los últimos meses y eso que ya tiene más de 1 año de vida.

Herramientas para enviar y leer newsletters

Si Blogger y WordPress permiten seguir a los blogs que se alojan en sus plataformas, ¿por qué no iban a hacerlo los servicios que permiten enviar (y alojar) newsletters? Algunos ya lo hacen.

Substack Reader

Desde el mes pasado, con Substack Reader puedes leer las newsletters a las que te has suscrito y que hayan sido creadas en su plataforma. Empiezas solo con esas, pero también puedes añadir RSS y podcasts. En base a eso, en la sección de Inbox te muestra los títulos de las ediciones (y posts) como si fuese una bandeja de entrada, pero no los previsualiza como harían los gestores de correo y los abre en una pestaña nueva.

Tiene una sección de Discover que complementa este servicio para promocionar a su comunidad, pero, para los lectores, no tiene mucho sentido porque deja fuera las newsletters que se reciben desde otros proveedores.

Revue

Mientras, también hay movimiento en la competencia de Substack porque la semana pasada saltó la noticia de que Twitter había comprado Revue. Reconozco que estuve valorando estas opciones para enviar mi nueva newsletter de pago, pero las descarté y no las veo como herramientas para leer.

Si te fijas, hay varias opciones de esta lista que permiten leer tuits, ¿quizá Twitter se ha cansado de que otros lo ofrezcan y ellos no? Parece que se están dando prisa y seguro que pronto sabremos cómo se van a integrar ambas plataformas.

Supscrib

Esta herramienta es una mezcla de las anteriores porque Supscrib te crea una dirección de correo para leer tus suscripciones, pero también te permite recibir newsletters premium activando un simple botón.

En realidad, esta funcionalidad que llaman premium es un servicio para creadores de contenido que pueden ofrecer desde ahí sus envíos (como si fuese un directorio) y que los usuarios se suscriban. Lo curioso es que, dicen, no se consiguen los datos de los suscriptores, es decir, no se crea una lista de envío propia para los remitentes.

Herramientas de lectores de RSS

Si las newsletters son una fuente, ¿por qué no incluirlas en un lector de RSS si algunas hasta se ofrecen en este formato? Pues sí, es posible.

Feedly

Cosas que pasan: unos cuantos meses después de registrarme en Stoop, Feedly añade la opción de seguir newsletters (fue en verano, al poco tiempo de incluir Twitter). El funcionamiento parece similar, con una cuenta de correo suya, y tiene la ventaja de que puedes leerlo todo en el mismo lugar. Lo malo es que es una funcionalidad de pago (unos 10€/mes). Dentro de ese nivel de suscripción, podrías sacarle mucho más jugo a Feedly porque, además de seguir más fuentes y una mejor búsqueda, incluye integraciones y tableros públicos.

Inoreader

Antes de que Feedly lo hiciese, allá por febrero de 2020, Inoreader lanzó esta misma opción de considerar las newsletters como fuente de información, sumándolas a otras que ya ofrecía (como Twitter o podcasts). Funciona en web y app, pero también es una funcionalidad de pago (unos 5€/mes) aunque hay ofrece otras ventajas, claro.

Feedbin

Y aún mucho más antes, estaba Feedbin que ya desde 2016 permite incluir las newsletters (además de Twitter y YouTube) entre las fuentes para leer noticias. Cuesta 5$/mes y se puede utilizar con varias apps. También utiliza una cuenta secreta para la suscripción y las agrupa por remitente.

Otro tipo de herramientas

Hay mucho movimiento en este mundillo así que acabo con algunas opciones más que me cuesta catalogar, pero que quizá en un tiempo se conviertan en una categoría propia.

Mailbrew Inbox

Mailbrew es un servicio que envía un resumen de diferentes fuentes (RSS,  Twitter, YouTube, Google News) y que desde el verano pasado también ha añadido la opción de agregar newsletters. Así, Mailbrew Inbox también te proporciona una dirección de suscripción y organiza un resumen diario con todo lo que hayas seleccionado y te lo envía a cambio de 8$ al mes. Además, puedes hacerlo público y así compartir tus fuentes como si fuese tu propia newsletter curada.

Listory

Listory te ofrece una lista de suscripciones y tú eliges de cual quieres recibir los contenidos. Es como leer sus blogs, pero en realidad lees sus newsletters. Dicen tener miles de opciones para extraer el mejor contenido de ellas de forma temática y así enviarlas a los usuarios registrados. Además, lo venden como una forma de aprender a diario (algo que parece tendencia entre las herramientas de content curation).

Consoom

En pleno agosto NewsBox se dio a conocer como una app similar a las que nativas. Según sus autores, la diferencia era que estaba pensada para crear una comunidad (no necesitas un correo, podías suscribirte directamente desde la app). Tanto es así que al poco tiempo cambió a Consoom donde explican ser una comunidad de creadores de newsletters para facilitar las conversaciones sobre ellas. No dan muchas pistas, ya veremos cómo termina.

¿Utilizas alguna herramienta para leer tus #newsletters? Descubre las diferentes opciones que hay en este mercado. Compartir en X

Solo algunas de estas herramientas están en mi directorio de herramientas de contenidos, pero cualquiera te serviría para leer mis dos newsletters.

[Contenidos] Niveles de madurez de content curation

Sobre el nivel de madurez hablo largo y tendido en «Estrategia de contenidos» como una forma medir el compromiso de la empresa con los contenidos. Así es más sencillo marcar los pasos para evolucionar desde un uso básico hacia uno más avanzado. Hay personas y empresas en todos los niveles, lo importante es no estancarse y hacer lo posible por seguir subiendo.

Modelo de madurez de la curación de contenidos

El modelo de madurez de la curación de contenidos que proponen Hilary Marsh y Elizabeth Engel en «Cut Through the Clutter: Content Curation, Associations’ Secret Weapon Against Information Overload» incluye siete etapas.

Propuesta para la madurez de la curación de contenidos

Los gráficos ayudan a entender fácilmente cada nivel:

  1. En el nivel más bajo se agrega información según criterios de cantidad, lo cual coincide de lleno con el nivel básico de madurez de la estrategia de contenidos.
  2. Se sube de nivel al basarse en la calidad y los criterios editoriales.
  3. La curación se vuelve personal, basada en intereses, en el tercer nivel.
  4. La inteligencia artificial hace su aparición en el cuarto nivel cuando recomienda contenido según su comportamiento e interacciones previas.
  5. La escala cambia un poco de orientación para enfocarse no solo en cómo se encuentra y selecciona la información, también en cómo se comparte. Así, en el quinto nivel se proporciona contexto agrupando las noticias por tema.
  6. El siguiente nivel es cuando se añade personalidad, es decir, una perspectiva y voces específicas.
  7. El séptimo nivel y más alto se añade análisis para que la audiencia entienda cómo les influye lo que se ha seleccionado.

Como ves, la contribución del curator es mayor cada vez, pasando de lo superficial (simplemente mostrar información) a lo más profundo (conectar los puntos).

¿En qué nivel de madurez está tu #contentcuration? Compartir en X

¿Qué hace un buen content curator?

En el mismo documento, Hilary Marsh recupera un post de 2011 de Robin Good en el que se apuntaban las tareas de un buen content curator (muy parecidas a las que apunté aquí mismo en 2012). Selecciono las más relevantes (en traducción libre):

  • Utiliza fuentes verificadas de calidad y les da crédito apropiadamente para recomendarlas, incluyendo a otros curadores.
  • Filtra la mayoría del contenido entrante.
  • Clasifica las piezas para que los lectores las sitúen correctamente en sus mapas mentales.
  • Extrae los mejores fragmentos del original para ayudar a los lectores a leer la pieza más rápidamente.
  • Proporciona contexto para mejorar la comprensión y proporcionar profundidad, si es necesario escribiendo contenido propio.
  • Complementa la información con enlaces a recursos adicionales.

Así el curator alcanzaría la grandeza al proporcionar valor a su audiencia, ayudándoles a dar sentido a la información.

¿Qué hace un buen content curator? Proporcionar valor a su audiencia, ayudándoles a dar sentido a la información Compartir en X

[Contenidos] +175 Herramientas para todas las tareas relacionadas con los contenidos

Las personas que trabajan con contenidos necesitan herramientas, de eso no hay duda. Además, es más fácil de lo que parece asignarles recursos. El principal problema es que hay muchas, quizá demasiadas. Más aún si se tienen en cuenta todas las tareas que pueden relacionarse con los contenidos.

Yo hace años que voy recopilando herramientas de formas diversas, como posts, ebooks, enlaces guardados en Pocket, Wakelet, Pearltrees, listas en Twitter y hasta en List.ly o Trello. Pero la mejor forma ha sido crear una base de datos en Notion. El año pasado empecé a poner orden y el resultado es un directorio muy completo que he decidido hacer público y, además, rentabilizarlo.

La verdad es que no tenía claro si merecía la pena hacerlo hasta que Jaime compartió sus datos: su proyecto empezó igual que el mío y él estaba sacándole rendimiento, ¿por qué no probar con mi lista de herramientas? Ya sabes que me gusta experimentar, así que revisé cómo lo había hecho él y alguien más y me puse manos a la obra.

Como ya llevaba un año llenando la base de datos, fue fácil para montar el resto del proyecto y en un par de días lo tuve listo. Aún así, aproveché para revisar toda la base de datos, más de 175 herramientas, y la semana pasado lo compartí con mis suscriptores. Confieso que sirvieron de conejillos de indias, pero el resultado ha sido sorprendente y por eso ahora lo lanzo oficialmente.

Tienes todas las respuestas a qué es el directorio, qué tipo de herramientas hay y cómo acceder a la lista en mi centro de recursos.

[Contenidos] Cuánto tiempo se necesita para estar al día

Comentaba hace un par de meses que el tiempo de lectura se muestra en muchas piezas. Es una forma de medir cuánto se ha escrito (la extensión siempre preocupa, sea poca o mucha), pero lo usamos para saber cuánto hemos de invertir en leer un contenido y así juzgar antes si merece la pena o no considerando el tiempo que tenemos disponible.

Luego no solemos tardar lo que sugiere porque le dedicamos menos o más en función de cuánto nos interesa el contenido. Ésa es la variable que debería tener en cuenta el cálculo, pero es demasiado personal como para que funcionase en general. Por eso lo sencillo es tener cuenta solo el tiempo de lectura.

Como content curators, combinamos las dos variables porque somos los que ahorramos tiempo a los que les interesa un tema.

Hacer #contentcuration sirve para ahorrar tiempo a los interesados en una temática, entre otras cosas. Compartir en X

La situación ideal es tener tiempo e interés y es más fácil que ocurra cuando no tenemos algo que nos preocupa. Llámalo vacaciones, paro o confinamiento, incluso baja si no es grave. También puede ser cuando llega la época de replantearse algo en la vida, como en año nuevo o por algún aniversario. Cuando tenemos tiempo libre en nuestra vida profesional, lo utilizamos (o deberíamos) para leer o formarnos (no vale procrastinar). El objetivo es ponernos al día, recuperar lo que nos hemos perdido.

Ahí entra la curación de contenidos: un curator siempre sabe lo que se cuece porque se mantiene actualizado mientras el resto usa el tiempo en otras tareas.

Para el resto de mortales, tener tiempo puede significar unos minutos al día o un mes de vacaciones. Depende de la situación, pero pongámonos en una hipotética y (teóricamente) típica: una semana con sus 5 días de trabajo y su fin de semana de descanso. Eso nos da el supuesto de 40h semanales rodeados del tema que nos interesa, aunque obviamente no podremos dedicarlo todo a estar al día. Y tampoco deberíamos usar el tiempo libre para lo que se debería considerar parte del trabajo (sin estar al corriente de la actualidad, es más difícil elegir el tornillo adecuado).

Entonces, ¿cuánto hace falta para hacer seguimiento de la actualidad y estar al día? ¿Hay un mínimo o máximo? ¿Cuánto es suficiente o cuándo hay que parar?

Te contesto con un ejemplo: mi newsletter. La escribo los domingos, pero suelo encontrar los enlaces a ratos entre semana. Cuando esto no ocurre, sea porque no son suficiente interesantes o porque no he tenido tiempo, los busco. Hasta que no tengo lo que considero mínimo para la newsletter (6 enlaces), no dejo de buscar. Suelen ser un par de horas, aunque también puedo pasarme todo el día leyendo y acabarla a última hora de la tarde. Cada semana es diferente ycada uno sabe a qué quiere dedicar sus ratos libres.

Pensando en perspectiva semanal, es posible que la media sea de 1h/día lo que dedico a seguir la actualidad de mi sector. Eso son unas 7h a la semana que no facturo directamente (las que dedico a los temas de mis clientes sí lo son, por ejemplo para hacerles newsletters curadas). Pero, ese tiempo, sean 5 o 20h a la semana, sí que a la larga me devuelve con creces lo que he invertido y por eso no me importa gastarlo.

Preguntando por Twitter, parece que 1h es lo habitual, aunque también puede hacerse cuando no se tiene mucho tiempo. Lo importante es elegir bien las fuentes y las herramientas para que, sea el rato que se invierta, resulte rentable.

Leo muchas ofertas de empleo, pero ninguna incluye que se dará tiempo al trabajador para estar al día (más allá de ofrecer formación) o que esto sea parte de sus tareas o habilidades deseadas. Aún así, quiero pensar que los que terminan llevándose el puesto son los que tienen y demuestran esa capacidad. Quizá dentro de unos años en el apartado «qué ofrecemos» se incluya «tiempo para puedas estar al día».

Mientras las empresas no se preocupen por ello, espero que los 4 minutos que has invertido en este post de 700 palabras te sirvan ahora o en el futuro.

Preocúpate tú por estar al día porque tu empresa lo valora, aunque quizá no lo fomente. Compartir en X

Si eres el responsable de un departamento y crees que tu equipo necesita ponerse o mantenerse al día, conviértete en curator o contrata a uno.

[Contenidos] Hacer content curation sirve para crear una marca personal

Cada content curator es diferente: todos sienten curiosidad pero tienen su propio criterio y en base a él construyen su comunidad. Lo personal se convierte en corporativo cuando se crea la estrategia de content curation para las redes sociales de una empresa, pero siempre hay una persona detrás. Y las mismas tareas que se hacen para el trabajo (con o sin programa de embajadores) se pueden aplicar a un hobby o a la marca personal. Más aún si hablamos de hacer content curation en LinkedIn.

Viendo lo que se publica en esta red social profesional, acaba siendo evidente que se usa para contar los méritos propios, sean personas o empresas. Supongo que las segundas creen que así «entran ganas» de trabajar con ellos y que las primeras buscan «despertar el interés» en reclutadores y clientes potenciales. Pues no hace falta caer en el egocentrismo para crear una marca personal, de hecho, hacer content curation demuestra ciertas habilidades que pueden ser más interesantes que hablar de uno mismo.

Destaco las que me parecen más relevantes para cualquier tipo de empleo:

  • Estar al día: un curator lee mucho, mucho más de lo que comparte. Así que sabe bien qué se cuece en su entorno y cuáles son las fuentes más fiables de su sector.
  • Sentido crítico: después de tanto leer, un curator puede valorar la calidad de una pieza, encontrar sus puntos débiles y fuertes.
  • Capacidad de análisis: gracias a su interpretación de la información y la visión de diferentes ángulos, un curator llega a sus propias conclusiones (esto es bueno, sí, lo es).

La curación de contenidos también permite escribir mejores artículos, pero no todos los puestos lo requieren mientras que los tres puntos anteriores deberían ser obligatorios sin importar el puesto o el sector.

Hacer #contentcuration es beneficioso para la marca personal: no hables solo de ti, enlaza a contenido de otros. Compartir en X

Opciones de LinkedIn para hacer content curation

En España hay unos 12 millones de usuarios en LinkedIn: alguno estará ahí para encontrar y no solo buscar. Por mucho que Facebook haya incluido un apartado para ofertar empleos en las páginas de empresa, LinkedIn no ha perdido esa posición: es el lugar en el que (se supone) resulta más fácil encontrar candidatos y clientes. Así que es un buen lugar para hacer content curation y demostrar de forma práctica que valemos más de lo que pone en el CV.

Si quieres otro incentivo, el Social Selling Index de LinkedIn valora «descubrir y compartir actualizaciones que incitan a la conversación para crear y fortalecer relaciones», ¿no te suena a que premia hacer content curation? Así se demuestra que es verdad esa etiqueta de «experto/especialista» que tan fácil resulta ponerse en los perfiles sociales.

LinkedIn se centra en la búsqueda de empleo y por eso ayuda a que los candidatos brillen compartiendo contenido. Hay varias funcionalidades que sirven para facilitar el trabajo del curator, por ejemplo: el buscador no está nada mal y los hashtags son una buena ayuda para identificar personas y contenidos relevantes.

En mi guía «Content curation en LinkedIn» puedes encontrar una lista con todas las opciones.

Recuerda que lo básico para una buena curación es la selección de fuentes, así que los contactos y los hashtags que se siguen en LinkedIn así como los grupos de los que seamos miembros serán lo que determinará la calidad de lo que tendremos que seleccionar y decidir si compartir o no.

Para saber más sobre marca personal, pásate por la selección de Guillem en Flipboard o hazte con alguno de los libros de Andrés.

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