[Contenidos] Cómo hacer que más gente lea tu contenido

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes.

Sigo con el tema de los objetivos de los textos. Sin entrar si pueden ser comerciales o de branding, hay uno que nunca hay que perder de vista: que se lea. Que alguien lea su texto es el objetivo principal del redactor, la primera etapa que ha de superar… y su mayor recompensa como acabamos de ver.

Pero fíjate en el título de este apartado, el tema es que te lea más gente. Así es cómo Mark Brownlow ha titulado su viñeta y su post y es por esto que clické en el tuit que me hizo descubrir ese secreto. Primer aprendizaje: que el título sea llamativo.

A la hora de verdad, tampoco la solución es tan novedosa (segundo aprendizaje): utilizar párrafos más cortos, de unas 5 líneas. Tercer aprendizaje: cuidado con las expectativas. Porque esa puede ser una forma de conseguir que la gente ‘lea mejor’ y eso implica que ‘leerán más’ pero no significa que ‘más gente lo lea’. Cuatro aprendizaje: que el título sea real.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 45 (20 de junio de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] Repetir, repetir y repetir

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes.

La repetición funciona, estas líneas lo confirman: en dos artículos diferentes me he encontrado con la recomendación de repetir el mensaje y aquí estoy repitiendo que repetir es buena idea. ¿Por qué repetir? Porque, como dice Andrew Hanelly, la verdad es que tu audiencia no sabe qué escribiste hace dos años probablemente ni hace dos meses.

Y esto es así por dos motivos principales porque la audiencia cambia y, como explica Angela Bray parafraseando a Guy Kawasaki, no estamos todo el día pendientes de leerlo todo. Se aplica sobre todo a medios sociales, siempre claro que la repetición no se vuelva obsesión y aburra, pero también a páginas corporativas ya que conviene recordar que los usuarios no siempre entran por la página principal.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 44 (14 de junio de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] Comparando bocadillos con artículos

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes

Después de trabajar en el jardín de los contenidos, ¿te apetece un sandwich? Sí, seguimos hablando de escribir y no artículos de cocina. Y es que en Write to Done comparan los artículos con los bocadillos.

Según este planteamiento de Sean DSouza, las rebanadas de pan equivalen a la apertura y a la clausura de un texto. Igual que para que el bocadillo sea fácil de comer necesita el pan arriba y abajo, los artículos también. Hablamos entonces de introducciones y conclusiones que pueden ser casi idénticas.

Siempre hay excepciones (¿los montaditos se pueden considerar bocadillos?) pero coincido bastante con la idea. Pero también es cierto que si la rebanada superior tiene algo diferente (llámale sésamo o una buena pregunta que anime a seguir leyendo), el bocadillo será más atractivo.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 38 (2 de mayo de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] 10 técnicas de redacción persuasiva

Rebuscando entre enlaces que tengo guardados, me reencuentro con un post de 2007 de Brian Clark sobre 10 técnicas de redacción persuasiva. Lo he recuperado para el libro que estoy escribiendo así que lo adapto libremente porque, a pesar de tener ya unos cuantos años, sigue teniendo vigencia y utilidad para escribir online.

  1. Repetir: en un entorno literario, utilizar figuras retóricas de repetición como la aliteración o la anáfora sirve para referenciar sonidos o recalcar palabras. En un entorno corporativo, lo que se repite es la Idea (sí, con mayúsculas) mediante varios formatos.
  2. Comparar: y más recursos literarios porque las metáforas, símiles y analogías dicen en Copyblogger que son los mejores amigos de los escritores. Y no solo para comparar cosas que se parecen, sino aquellas que no son tan iguales.
  3. Argumentar: buscar las explicaciones obvias y las que no lo son tanto ya que el usuario siempre tendrá alguna que hemos de descubrir. Por ser la técnica más evidente es la más recurrente.
  4. Justificar (reason why): aclarar los argumentos con un «porque…» es la manera más fácil de convencer. Es como escribir para niños que siempre preguntan «¿y por qué?» pero sin el efecto autoritario del «porque si no…».
  5. Empatizar: demostrar al usuario que sentimos lo mismo que él, eso sí, después de haberle provocado ese mismo ‘dolor’ con nuestros textos. Nuestra solución solo será creible y le logrará persuadir si antes hemos demostrado que le entendemos.
  6. Coherencia: es una cuestión de confianza, fácilmente entendible si extendemos la redacción también a medios sociales. Lo que escribamos ahí y en nuestra web corporativa siempre tiene que estar alineado.
  7. Pronosticar: de nuevo entra en juego la credibilidad para convencer o persuadir al usuario que tenemos una bola de cristal que nos dice lo que pasará en el futuro y que éste pasa, claro está, por nuestro producto.
  8. Terceros (social proof): usar las palabras de otras personas como son testimoniales de clientes o menciones sociales puede convencer a los usuarios de que lo que decimos es cierto (también es repetición si confirman nuestras palabras).
  9. Invitar (go tribal): ofrecer al usuario algo que quiere por exclusivo y limitado es una buena forma de persuadirle a que haga algo.
  10. Storytelling: contar una historia es posiblemente lo más persuasivo que hay y combina fácilmente con la mayoría de técnicas explicadas así que, si tenemos que elegir, es la mejor opción. Aunque precisamente por eso es la más difícil.

Más sobre redacción web y sobre mi próximo libro en mi newsletter semanal sobre marketing de contenidos.

[Contenidos] ¿Bloques de texto o párrafos?

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío cada lunes.

Ya hemos comentado que el diseño puede ayudar o perjudicar a la lectura de los textos. Trasladando a la pantalla la configuración de una página, los márgenes, la justificación o el interlineado pueden hacer que el contenido quede demasiado espaciado o, todo lo contrario, forme un bloque compacto.

Lo que seguro depende del redactor es preocuparse de la extensión de cada párrafo. Para cumplir con la regla de una idea por cada párrafo no hace falta que cada uno tenga el mismo número de frases o de palabras. Conviene construir párrafos irregulares, de diferentes tamaños. Mezclar alguno más largo de 4 o 5 frases, con otros más cortos de 2 o 3, para darle más dinamismo a la página.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 32 (21 de marzo de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

Para ser legal, te aviso de que utilizo cookies en esta web:    leer detalles y configurar preferencias
Privacidad