Hace unos meses, la manera de vender el Seat Toledo era la medida de una tabla de surf. En el spot un deportista de sumo hacía surf para luego guardar la tabla dentro del coche. En la prensa anunciaban que era el primer coche en el que cabía dentro una tabla.
Ahora de nuevo tenemos surfistas metiendo tablas en coches. Esta vez es la Gran Prueba de Opel la que saca a tres surfers (no va a ser menos que Opel, claro). En este spot vemos gente de todo tipo con diferentes coches mientras leemos «Dómame», «Elígeme», «Condúceme»… muy en la línea de la «M» misteriosa. En su web invitan a registrarse para probar los coches después de descubrir la relación entre los imperativos y las características del coche.
Hacer surf estuvo de moda hace ya un tiempo. Ahora se ha convertido en una tribu urbana más. Pero esta, vende coches. Ni ellos lo deben saber.
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