Si la frase del «Sexto sentido» era un «En ocasiones…», mi blog debería ser un «Siempre…». En un día ‘normal’ ¡Veo temas por todas partes! En el metro, caminando por la calle, leyendo la prensa o una revista, navegando por Internet… La gente camina tranquilamente entre ellos ¡y no les afecta!
Hoy, sin ir más lejos: en el metro una chica llevaba una carpeta de J&B y un bolso de Absolut: ¡Toma tema sobre el merchandising! En el Canal Metro una tía destetada anuncia ‘algo’: ¡Toma tema sobre la idea de ‘Dos —– tiran más que dos carretas’! En la televisión reportajes especiales sobre el 11M: ¡Toma tema sobre el derecho a que les dejen en paz ya! El anuncio de Hyndai tiene ya dos partes: ¡Toma tema sobre las segundas partes de los anuncios! En la prensa sale un anuncio del concurso de Ikea: ¡Toma tema sobre el uso que hace de Internet!
¿Es que sólo me parecen interesantes a mí este tipo de cosas? ¿Soy una paranoica que tendría que estar encerrada en un sitio donde no tuviese acceso a los medios de comunicación? ¿Existe realmente ese lugar (y que nadie diga GH ni lugares naturistas)? ¿Es posible vivir sin un sólo estímulo publicitario o, lo que es lo mismo, sin ser atacada por una acción comercial de una marca?
Pero la pregunta real no es ninguna de estas, sino ésta: ¿querría yo vivir sin todo esto? ¿Podría dejar de ser workaholic? Creo que mi respuesta es no. ¿Y la tuya?
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