Media News S47 A12

Publicidad
Llega esa bonita época del año en la que los anuncios nos recuerdan que hemos de ser buenos si queremos que nos traigan regalos. El spot de la Lotería de Navidad se esfuerza como siempre en tratar de reflejar a toda la sociedad, en diferentes lugares y profesiones. Pero sigue siendo especial el aire con el que envuelve a los protagonistas, esa magia que te hace soñar con que hasta puedes ganar. Luego tenemos el spot del Rasca de Navidad la ONCE que es todo lo contrario. Pasa en una calle que podría ser cualquiera, habla del frío, de lo que cuesta oír que ‘todo va bien’ aunque también habla de regalos aunque, menos mal, sin ver quién de los dos protagonistas tiene más trabajo. Pequeño guiño al final y que quede bien claro que es un anuncio. Todo lo contrario que en Loterías que mantienen el espíritu navideño durante todo el anuncio, bueno, casi cortometraje.

Televisión
Hoy que se celebra el Día Internacional de la televisión y por mucho que esté Twitter y la blogosfera revolucionada, la tele sigue igual que siempre. Unos se quejan de que solo dan telebasura, que no es de calidad, que no representa a la sociedad, que no deberíamos pagar la pública, que hay muchos anuncios en la privada, que si la pluralidad, los colores políticos… y mientras otros la miran, la disfrutan y la hacen crecer en audiencia. Siguen siendo millones contra unos pocos, creo que te imaginas quién va perdiendo porque, como al hablar de política, está la inercia y los que quieren que algo cambie. Se consiguen pequeños hitos de tanto en tanto pero hay que hacer mucho para sacarlos de sus sillones mientras que ellos lo tienen muy fácil para sacarnos de los nuestros: solo han de seguir emitiendo como hasta ahora.

Cine
Otros millones son la estrella en este apartado de cine, pero no son espectadores sino los que se han pagado por un par de objetos de colección aunque para muchos no valdrán nada. Es en estos casos cuando el cine se convierte en arte, no en una fábrica donde, aunque sean sueños, se produce en masa. El arte es único, tiene valor conservarlo, se subasta porque hay muchos interesados y dispuestos a pagar altas sumas. Pero el arte también es subjetivo, diferente para cada persona que lo mira y criticable por todo el mundo. Así que para algunos es arte y para otros no, para algunos tiene sentido pagar millonadas y para otros no.

Internet
La semana pasada se me olvidó comentar el nuevo vídeo de Socialnomics, la versión de 2013. Podría decir que no tiene sentido el título porque en dos meses (tiempo que falta para cambiar de año) los datos que pone en el vídeo ya no estarán actualizados pero hay algunos que se repiten del año anterior así igual sí que hay cosas inmutables en los medios sociales… como Facebook, YouTube o China. Y algunas que de un año para otro pierden interés como Obama que ha pasado de estar en todos los ejemplos a un discreto segundo plano… en el primero no sé bien qué ha habido pero ya me enteraré en el próximo vídeo el año que viene.

Media News S44 A12

Televisión
Me gusta la idea que leo en El Diario de Mr. MacGuffin: las series solo deberían durar 5 temporadas. Haciendo repaso mental, es cierto que algunas que se han alargado han perdido gran parte de su gracia inicial. Pero quizá ese es el problema, que las comparamos con la idea original que nos hizo ver la serie y, por el camino, los personajes y las tramas evolucionan tanto que podrían ser series nuevas. O, al contrario, se quedan tan estáticos que se agotan las ideas para tramas diferentes. Pero ahí está James Bond o Sherlock Holmes para demostrar que hay personajes que pueden vivir mil y una aventuras y seguir siendo interesantes.

Internet
Me gusta la idea del Calvo con Barba: socialbasura. ¿Es posible replicar modelos de telebasura en los medios sociales? No sé qué opinas, te animo de dejar un comentario aquí o en su post pero yo creo que no tardemos mucho en llegar a ese punto si no es que ya estamos ahí. Considerando los contenidos que más se comparten, está claro que hay un problema comparable con los programas que más se ven y que son de dudosa calidad. Igual tenemos lo que nos merecemos: si compartimos sin leer, ¿alguien va a esforzarse en producir contenidos de calidad que nadie lee? Menos mal que aún hay a quien responde a esta pregunta con un «yo».

Cine
Me gusta la idea que leo en Blog de cine: ver películas de terror en el sofá ayuda a quemar calorías (decir que adelgaza me parece excesivo). Es una cuestión de ritmo cardíaco por lo que sería interesante tener datos de cuántas calorías se puede perder con otros géneros. ¿Y el musical o el de acción? Vale, otros bailan y corren pero también hay quien los imita en casa dando cuatro brincos. También el corazón se acelera en películas de suspense y (debería) latir con más fuerza en películas románticas. Aunque, yendo al otro extremo del estudio, ¿la risa no es más eficaz para quemar calorías? Si lo pruebas, ¡comparte los resultados!

Publicidad
Me ha gustado el anuncio de Mitsubishi por lo nostálgico de su protagonista. Y no, no es el padre ni el coche si no una ranita que hace ese ruidito característico y que no todos sabrán reconocer. Pero ciertas generaciones tuvimos esas ranas que, ahora que lo pienso, no tienen mucha lógica así que parece lógico que tampoco lo tenga el hecho de que cuando se toquen aparezcan o desaparezcan cosas. Solo salva al anuncio la ranita, ese apunte de otra época que no entienden ni los que salen en el anuncio así que me pregunto si los creativos sabían qué eran esas ranitas o se las han sacado de la manga como podría haber sido otro animal.

Media News S42 A12

Publicidad
Ha llegado esa maravillosa época del año en la que los anuncios de coches y de perfumes llenan los cortes publicitarios. En cada uno, varias marcas se esfuerzan en que olvidemos a la anterior y a la anterior e impactarnos tanto que no prestemos atención a la siguiente y a la siguiente. Será el plan PIVE y que se acercan los regalos de Navidad pero ya están tardando los juguetes en hacer su entrada. De coches, de momento, me quedo con el spot de Peugeot pero con los perfumes lo tengo más complicado porque se mezclan la sorpresa en la elección de sus protagonistas (como Chanel Nº5 y la total ausencia de expresión de Pitt, la Roberts caminando entre marionetas que no llevan Lancome o más famosos que ni reconozco) con la diversión de no saber la marca hasta el final de la historia que cuentan. Quizá por eso me gustan.

Internet
Mucho se ha hablado ya de cierto salto estratosférico pero me interesa hablar del patrocinador del evento por la calidad de las imágenes que podían seguirse online. Casualmente, en uno de sus intentos estaba yo también conectada con un lugar mucho más cercano y no era capaz de seguir ni la mitad de lo que el invitado explicaba en una universidad de Madrid. Además de que la calidad de la imagen y del audio era pésima, ni se esforzaron por enfocar al ponente o enseñar la pantalla para ver su presentación. Con las dos pestañas abiertas, la diferencia era más que evidente: por un momento, me sentía en el pasado de la conexión y, al cambiar, compartía imagen con más personas que en televisión.

Televisión
Esta semana se ha estrenado un programa que estaba destinado a triunfar. No lo he visto, esta vez ni siquiera un minuto en zappings, pero me lo imagino y ahí está el problema que tiene éste y otros muchos productos televisivos: son previsibles, sin imaginación, sin interés. Si ya sabes que lo que vas a encontrar no te gusta, ¿para qué verlo? Lo mismo que con el piloto de «Perception»: ya sabía qué podía esperar pero como el género me gusta, le di una oportunidad. Los ingredientes clásicos de los géneros, aunque sean nuevos, son lo que predispone a ver por primera vez esa cosa que llaman programa o serie. Luego igual te quedas por otra cosa pero superar la barrera de ‘esto no van conmigo’ es difícil en ciertas cadenas.

Cine
Entradas a 2 euros, ese es el reclamo para llenar las salas. Desde luego, es mucho más barato que de costumbre cuando puede llegar a ser hasta 5 veces más. Como siempre en estos casos, la duda es si les sigue saliendo rentable pero está claro que sí porque a un cine le cuesta igual que haya una persona o que esté lleno: una vez han puesto la película, mejor cuanta más gente haya para cubrir el gasto. Así que se me ocurre que podrían incentivar la compra no por impulso si no al contrario, la reserva con antelación: cuando más tiempo antes la compres, más barata será la entrada. Para los que se deciden en el último momento y ven una como podrían ver otra, el precio normal; y a los que entran con la peli empezada, que les cobren el doble.

Media News S04 A12

Publicidad
Hacía tiempo que H no me traía nuevas campañas pero este lunes Telecinco estaba algo descontrolado porque en 2h que dura la sesión semanal de «CSI» puso el nuevo spot de Lancia cuatro veces: la primera me quedé pegada, la segunda me fijé en los detalles, la tercera me pareció un chiste y la cuarta cambié de canal. Ojalá me encuestasen de Lancia para saber su notoriedad, les podría decir que son unos pesados. Pero más allá de la planificación, el anuncio me llama la atención por la palabra ‘historia’ mezclada con las características que quieren transmitir de sus diferentes modelos. Así que mientras van diciendo palabras como ‘elegancia’ o ‘innovación’, ponen el nombre e imágenes de sus coches. ¡Qué anuncio más desaprovechado para contar su historia! Si ésta es igual a un ojo que parpadea, unas hojas que se caen y una chica dando vueltas… qué historia más pobre.

Televisión
Hay programas que parecen de otra época. Por sus decorados, sus presentadores que siguen aferrados al atril o simplemente por el formato que increíblemente nadie actualiza. Poner la tele y acordarme de esos horribles programas en los que se hacía bailar al público (un trabajo nada bien pagado por ese suplicio) a ritmo de politono (o similares) me da escalofríos. ¿Todavía se hacen? Sí, pero menos mal que parece que ya queda menos para que desaparezcan del todo. ¿Y aún hay gente que se atreve a decir públicamente que su sueño es salir en la tele? Pues eso es lo que ha dicho una de las participantes del último «12+1» según el corte promocional que también vi con horror el lunes. ¿Qué clase de telespectadores se están creando? ¿Unos que aplauden cuando se les dice aunque no estén en plató, que quieren sus momentos de fama?

Cine
La muerte de Theo Angelópoulos me lleva inevitablemente a pensar en las cosas que se dejan inacabadas al morir. Y no digo un blog o una cuenta en una red social, sino algo creativo que solo está en la mente, en este caso, del director pero que también podría ser la del guionista. Lo siento por los actores pero se ha demostrado demasiadas veces que, por muy desafortunado que haya sido el motivo, su trabajo puede clonarse digitalmente para salir del paso. En cambio, cuando se cambia el director o al guionista, la historia muta, ya no es la misma. Algo se pierde cuando uno de ellos cambia o abandona por cualquier causa un proyecto. Es ese algo que ponen de su parte. Llámale visión, creatividad, pasión… pero es algo que otros no tienen o desde luego no tienen del mismo tipo.

Internet
Los medios sociales son jóvenes comparados con otros medios pero han tenido tiempo de vivir muchas fases. Ayer hablábamos de ese momento de euforia mezclado con la inocencia del descubrimiento por los que ya han pasado y extralimitado ‘los grandes’ como Facebook o Twitter pero que, según María, todavía está viviendo Google+. Y, felicitando a Antonio por su 11 blogversario, me da por pensar en los blogs y en sus fases y, mezclado con el tema anterior del cine, reafirmo mis ganas de que no mueran, de que alguien siga teniendo ganas de dar su visión de la realidad en algo más que 140 caracteres. Porque todavía hay mucho que contar, muchas historias reales que explicar, leer y enlazar. Porque aunque ya hay blogs con publicidad o con empresas detrás, se siguen abriendo personales. ¡Menos mal que aún hay opinión!

Media News S45 A11

Publicidad
La última campaña de McDonalds es de esas que utiliza la vía sensiblera, la de la nostalgia, la del recuerdo. Pero, por una vez, está justificado: celebran sus 30 cumpleaños en España. En el spot, una cabina se convierte en túnel del tiempo y comunica a una persona con su yo del pasado para que le cuente cosas de su presente que casan con hitos de años pasados. Hay algunos facilones como el del Mundial pero el mejor guiño es la pregunta «¿inter-qué?». Si a ese chico del 81 le explicasen qué es YouTube, tampoco lo entendería (por mucho que crea en la comunicación intemporal). Pero ahí, en su canal de YouTube, McDonalds ha montado una experiencia de esas para recordar. ¡Que rule!

Internet
Nuevo estudio de Technorati sobre el estado de la blogosfera. Como siempre en estos casos, muchos datos interesantes no representativos de la blogosfera hispana pero que al menos pueden servirnos como referencia (aunque no tengamos tanto que envidiar en algunos aspectos). Como lo que más me interesa es la parte de relación con publicidad y empresas, me fijo en que el 14% de los bloggers dice cobrar por escribir posts patrocinados, siendo lo más habitual menos de 25$. A tener en cuenta las respuestas más votadas a «por qué no tienes publicidad»: «porque no quiero llenar mi blog de anuncios» y «porque no estoy interesado en hacer dinero con mi blog».

Cine
En Sparksheet listan 5 motivos por los que bastantes series actuales están basadas en libros. Algunos sirven también para cine, sobre todo el primero: los fans van incluídos. De esto precisamente me he quejado muchas veces: adaptaciones que insultan o no cumplen las expectativas de los fans y que no convencen a nadie VS aquellas que respetan el espíritu del original y se convierten en referencias cinematográficas. A la hora de la verdad, es decir, cuando se mira la recaudación, lo de menos es si los espectadores son fans o no: lo único que importa es que los que han ido querrían ver una segunda parte. Los fans están más predispuestos pero una mala adaptación los puede alejar.

Televisión
Divertido comentario el de Víctor Amela en La Vanguardia del lunes sobre «El debate más suntuario«: «un debate televisado entre Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban tendría mayor impacto socio-electoral» que el de los candidatos de los partidos mayoritarios. Me da pena tener que coincidir, pero es así: hay personajes televisivos que representan a una parte importante de la población a la que le preocupa más qué pasó ayer en el programa en el que aparecen aquellos dos que lo que esté escrito en el programa electoral. Lo que sería interesante es saber si los partidos se alegran o no que esas personas en concreto les representen, igual que estuvieron contentos de que otros actores o famosos lo hicieran anteriormente.

Para ser legal, te aviso de que utilizo cookies en esta web:    leer detalles y configurar preferencias
Privacidad