[Contenidos] Qué hacer cuando no hay inspiración

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes.

Cada uno escribe a su manera pero se pueden reducir a dos: con la inspiración de tu lado o sin ella. Cuando la inspiración te acompaña, las ideas se ordenan solas, las palabras construyen sus propias frases y las hojas se llenan en poco tiempo.

Cuando la inspiración o ese momento mágico en el que todo fluye no llega pero se han de respetar los plazos, cuesta un poco más cumplir con la extensión requerida. Lo mejor en estos casos es escribirlo todo tal cual salga, aunque parezca verborrea inútil. El esfuerzo viene después, en la edición y reescritura… pero al menos tendrás una base sobre la que trabajar.

Y si no hay plazos marcados, deja que las ideas maduren por si solas en su árbol que es tu cabeza… y espera que la inspiración te pille pensando.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 43 (6 de junio de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] Decisiones gramaticales

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes.

No me cansaré de decir que tenemos que conocer a las personas que leerán nuestros textos para adaptar nuestro lenguaje y tono. ¿Cómo sino esperamos conectar con ellos?

  • Primera decisión: el género gramatical. A no ser que nuestro producto esté orientado únicamente a mujeres, lo habitual es usar el masculino como generalización. No obstante, también se pueden utilizar adjetivos que sean neutros y dejar que sea quien lo lea que lo interprete.
  • La segunda cuestión a tener en cuenta, la persona gramatical: ¿tú, usted o nosotros? Tradicionalmente nos dirigíamos al usuario de usted, como forma de respeto. Las redes sociales han propiciado que se use más el tú y el nosotros (como plural inclusivo).
  • Y la tercera, el tiempo: aquí casi se acepta todo aunque los imperativos son cada vez más utilizados en los textos (haz click, visita esta página, descárgate…).

Relee si quieres esta newsletter fijándote cómo está escrita y verás… bueno, descubre tú cómo te trato.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 39 (9 de mayo de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] Diferencias y similitudes entre ebooks y whitepapers

La semana pasada, al comentar formatos más extensos que un post, avanzamos algunas diferencias y similitudes entre los ebooks y los whitepapers: tienen objetivos diferentes y, por tanto, también contenidos. En otras ocasiones hemos recomendado la descarga de unos y otros pero hoy vamos a tratar de clarificar más teóricamente para qué podemos usar cada uno de ellos.

Empecemos por lo que tienen en común: son documentos de extensión variable que suelen ofrecerse para descargarse en pdf ya sea gratuitamente o a cambio del correo. En este sentido, son buenas herramientas para aumentar nuestra base de datos de leads, de suscriptores o de fans en Facebook.

Pero tienen muchas otras diferencias:

  • Los ebooks se asocian con la versión digital de un libro pero antes de que nos invadiesen los ereaders ya existían. Su maquetación suele ser horizontal, con destacados, espacios en blanco y tipografía vistosa de gran tamaño: lo importante es la parte visual, por eso se utiliza un programa de diseño o PowerPoint en los más sencillos. El texto se orienta a consumidor final (B2C) con consejos e inspiradoras imágenes que los acompañan. La idea es más entretener que atraer a la venta.
  • Los whitepapers, en cambio, se pueden maquetar directamente con Word, en una página vertical como cualquier otro informe. Eso sí, la portada bien chula y con referencias a la empresa creadora al pie de cada página. Su contenido habitual es técnico, sin prestar demasiada atención a las imágenes, más allá de gráficos. Su público mayoritario son empresas (B2B) y el enfoque mucho más comercial que el de los ebooks.

La elección entre uno y otro debería ser fácil para las empresas pero lo cierto es que aquí cuesta encontrarlos (algunos se camuflan en ppts) y se utilizan mucho menos que en Estados Unidos.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 39 (9 de mayo de 2011).

[Contenidos] Algo más extenso que un post

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes pero como ayer fue festivo, lo republico y la envío hoy martes.

Partiendo de la base de que cualquier empresa debe generar contenidos interesantes para su público objetivo, uno de los problemas previos (incluso antes de encontrar los recursos para redactarlos y promocionarlos) es cómo presentarlos. Utilizando el símil de cualquier producto de consumo: ¿cuál será su packaging? ¿Cómo lo consultará el usuario?

Veamos hoy los artículos cuya extensión es demasiado larga para un post y que, para facilitar la lectura, debería publicarse en una serie de posts o en otro tipo de formato. Los más habituales son los white papers y los ebooks, dos tipos de contenidos similares en cuanto a formato pero distintos en cuanto a público, objetivos y, en consecuencia, contenidos.

La semana que viene hablaremos más en detalle de las diferencias entre ellos, centrémonos en cómo lo verán los usuarios que lo consulten. La opción más fácil es ofrecer la descarga del archivo en PDF en cualquiera de sus variantes (gratis, previo registro, a cambio del email…) pero también se puede permitir la consulta online con herramientas tipo SlideShare o Scribd.

Los catálogos de productos y las revistas también se han digitalizado para ahorrar costes de imprenta por un lado y para aumentar el alcance por el otro. Se utilizan entonces servicios más atractivos visualmente como pueden ser los ejemplos de Issuu, UniFlip o nxtbook. Como es habitual en medios sociales, estos servicios permiten incrustar nuestros documentos en otras páginas.

No hay que olvidar que son combinables con otros pensados para extensiones más limitadas.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 38 (2 de mayo de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

[Contenidos] Comparando bocadillos con artículos

Cada lunes republico un artículo de la newsletter semanal sobre marketing de contenidos que también envío los lunes

Después de trabajar en el jardín de los contenidos, ¿te apetece un sandwich? Sí, seguimos hablando de escribir y no artículos de cocina. Y es que en Write to Done comparan los artículos con los bocadillos.

Según este planteamiento de Sean DSouza, las rebanadas de pan equivalen a la apertura y a la clausura de un texto. Igual que para que el bocadillo sea fácil de comer necesita el pan arriba y abajo, los artículos también. Hablamos entonces de introducciones y conclusiones que pueden ser casi idénticas.

Siempre hay excepciones (¿los montaditos se pueden considerar bocadillos?) pero coincido bastante con la idea. Pero también es cierto que si la rebanada superior tiene algo diferente (llámale sésamo o una buena pregunta que anime a seguir leyendo), el bocadillo será más atractivo.

Originalmente publicado en la newsletter Marketing de contenidos, número 38 (2 de mayo de 2011). ¿Quieres leer más? ¡Suscríbete!

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