[TV] Sobre la calidad televisiva

Después de escribir sobre los Premios Zapping, he recordado que ya hablé de la calidad en televisión hace un tiempo. Para profundizar un poco más, he hecho una pequeña búsqueda en Google y he encontrado a Giuseppe Richeri y su (ya imprescindible) artículo «La calidad de la Televisión» en la revista TELOS (del verano de 1995, antiguo pero de buena cosecha).

Richeri reflexiona particiendo de «la divergencia entre la función social y cultural de la televisión y la naturaleza económica de la empresa televisiva» y analiza unos puntos de vista para definir la calidad de la televisión.

Merece la pena destacar forma y función. Forma: relaciona la calidad con características artísticas, estéticas y técnicas de manera que sólo los profesionales pueden juzgar la calidad y la innovación. Función: combina la información y la educación.

Richeri acaba su artículo con una reflexión que me recuerda a la de David Trueba: «hoy parece más apropiado referirse al sistema televisivo en su conjunto: su calidad viene dada por el número de canales y de programas diversos que se está en condiciones de ofrecer, disfrutando de la multiplicidad de redes y soportes disponible».

Mucho menos digerible es el (muy extenso) artículo de Charo Gutiérrez «Televisión y calidad: Perspectivas de investigación y criterios de evaluación» en la revista Zer. También es bastante antiguo, de noviembre 2000, pero en él la autora determina algunas condiciones que debe cumplir una producción televisiva para que pueda ser considerada de calidad.

Me quedo con que: estimule la imaginación de los espectadores, respete la pluralidad, tenga como propósito servir las demandas básicas de información, entretenimiento y ocio, y que fomente el conocimiento.

En otro artículo, encuentro otras características: profesionalidad, innovación y relevancia social.

Visto lo visto, ¿crees realmente que tenemos una televisión de calidad?

¿Más temas? Sigue atent@ y, si quieres, lo leerás aquí.

[TV] XI Premios Zapping a la calidad

Los 17.000 socios de Teleespectadors Associats de Catalunya (TAC) entregan anualmente los Premios Zapping a la televisión de calidad. La ceremonia de este año (para el 2005) fue el pasado jueves 23 en el Palacio de Congresos y esta noche en La 2 daran un resumen de media hora.

Puedes ver la lista completa de premiados en la web del TAC (los nominados en Terra). Pero entre los ganadores de esta XI edición, me gustaría comentar algunas sorpresas: al ver a Lidia Bosch como Mejor Actriz por «Motivos personales»; también al ver a Paco León por «Homo zapping», no porque no lo merezca, sino por considerar la imitación una interpretación; el premio deportivo a TeleCinco por su Fórmula 1, sobretodo por el lío que hubo con TV3.

Tambén destacar: el mejor anuncio para la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción y su «Ruleta Fortuna»; que Cuatro se lleva un premio por la series de producción ajena; y el premio Valores para «Mira’m bé» por mostrar la televisión desde la propia televisión.

¿Más temas? Sigue atent@ y, si quieres, lo leerás aquí.

[CINE] El trabajo del productor

En el trailer de «The last shot» («El último golpe», aunque quizá era mejor «La última toma») , Mathew Broderick pregunta «¿Y qué hace un productor?». Es una pregunta típica, que todos nos hemos hecho alguna vez, ¿verdad?

Para la mayoría la respuesta más fácil: «pone la pasta». Pero en realidad, deberíamos separar el concepto «executive producer» del «producer» para entender mejor qué hace un productor de cine. El primero sí es quien pone los recursos económicos, el segundo es quien «produce» la película.

Aquí, lejos de la factoría de sueños oficial del Mundo, suelen coincidir en una misma persona y por eso suele parecer que el productor invierte en la pelicula. En realidad, aquí también se mezclaría el trabajo del director que suele ser el que se busca la vida para poder ver sus sueños en la pantalla.

Al final en España tenemos personalidad múltiple, tres es uno: director-productor-inversor. Quizá por eso es más fácil pensar en el modelo americano para poder contestar a la pregunta de Broderick. Una definición que me parece adecuada: productor es quien «organiza la realización de una película».

En la fase de preproducción entra buscar la financiación, gestionar el presupuesto, contratar al equipo y proveerlo.

En la fase de producción de un mundo ideal, debería intervenir lo mínimo porque aquí el que manda es el director, aunque éste dependa del productor. Si se ha hecho bien la preproducción, el director no debería necesitar de él, pero siempre acabará vigilando el presupuesto y supervisando el rodaje.

En la postproducción, también debería centrarse en la promoción para recuperar la inversión y no del montaje de la película, aunque también sabemos que hay veces que las dos cosas están relacionadas.

En resumen, un productor vela porque la película empiece y se acabe bien. Es una labor racional, la emoción la pone el director. Por eso el productor vigila que el director tenga los pies en el suelo y controla el gasto.

¿Más temas? Sigue atent@ y, si quieres, lo leerás aquí.

[AD] Las Attitudes de Audi

Hace ya un tiempo que vemos por nuestra tele el último spot de Attitudes. Como seguro ya sabes, Attitudes es la iniciativa social de Audi para la promoción de la educación vial y la protección del medio ambiente.

La campaña de este año («Señales») gira alrededor de las prohibiciones que nos rodean. En el spot vemos una lista visual de señales tipo «no girar», «no hacer fotos», «no pasar», «no bañarse»… Todo ello con la significativa canción «Everybody’s gotta learn sometimes» y el utópico slogan «Ojalá algun día no tengamos que prohibir». La última imagen, por cierto, es la de una señal de persona (sin tachar, sin prohibir) en una carretera.

En la web www.attitudes.org (¿empezó en el 2001?) puedes ver el spot (la ficha técnica en PRNoticias). La gracia de este vídeo online es cuando acaba y aparece una línea de texto: «No hagas click aquí». Pero por supuesto, he hecho click, ¿y quién no?

Al «saltarte la prohibición» aparecen un par mensajes de alerta con mensajes tipo «Ojalá desaparezcan algún día las prohibiciones de nuestro paisaje porque actuamos con sentido común y dejamos de necesitarlas». En general la web es bastante «social» y por contenido podría pasar perfectamente por la una de ONG.

Aquí «lo raro» es que esta «iniciativa social» la gestione una marca de coches. ¿Y desde una bebida alcohólica? Ya hablamos J&B (Digeo) lo lleva un tiempo haciendo con su «Disfruta con inteligencia» o «Para disfrutar usa la cabeza» (la imagen en Cocktail).

Ahora que aún estamos sensibles con el tema fumadores, ¿te imaginas que hiciese lo mismo una tabacalera? Una web de una marca de tabaco que te dijese «fuma menos» o «trabajamos para que haya menos posibilidades de que pilles un cancer».

¿Más temas? Sigue atent@ y, si quieres, lo leerás aquí.

[WWW] Identidades de un blog

El otro día me di cuenta que desconocía el nombre del blogger que hay detrás de un blog que leo con asiduidad. Esto me hizo replantear el tema de este post (que tenía a medio escribir) y «reorientarlo» hacia la identidad del blogger en lugar de hacia el nombre del blog. De hecho, las dos cosas están relacionadas.

Si el blog cuenta lo que pasa por la mente del blogger (supergeneralista como lo llamaría Loogic) lo más fácil es usar un nombre compuesto de «El blog de» seguido de su nombre. Si el blog trata de un tema concreto que no sean sus pensamientos íntimos, se puede inventar algún nombre relacionado con el tema, más o menos original y más o menos fácil de recordar.

Y aquí viene el problema de la identidad. A la larga como lector, qué recuerdas ¿el nombre del blog o el del blogger? En el caso de blogs colectivos, en teoría, es más fácil pero cuando sólo hay una persona detrás, ¿quién conserva la identidad?

Recuerda por un momento qué has pensado antes de leer este post: ¿»A ver qué me cuenta hoy la Eva» o «A ver qué me encuentro hoy en downloading + media»?

Podemos complicar las cosas más si el blogger no utiliza su nombre sino un nick. Y la cosa se complica aún más si escribe en más de un blog (aunque no queramos escribimos diferente según para dónde escribamos). Y el colmo de la confusión de la identidad sería escribir en varios blogs con nicks diferentes. En este caso, eres carne de psicólogo seguro: tienes personalidad múltiple.

Así que decidir qué nombre le pones a tu blog es tan importante como con qué nombre vas a firmar tus posts porque, en resumen, has de decidir si quieres que «te recuerden» por tu nombre o por tu blog.

¿Más temas? Sigue atent@ y, si quieres, lo leerás aquí.

Para ser legal, te aviso de que utilizo cookies en esta web:    leer detalles y configurar preferencias
Privacidad